Cuanto tiempo ha pasado desde la última vez que anduve por aquí.
Ya les iré contando,
de a poquito,
todo lo que he hecho este último tiempo que,
sin ánimos de ser reiterativa...
¡no he parado!
Les cuento:
Les cuento:
salí de Algeciras el 17 de junio por la tarde
rumbo a Denia,
dejando a mis niños al cuidado de mi esposo
y manejé más de 600 kilómetros,
sacando fotos por el camino y con todas mis amigas
"facebookeras"
haciéndome el aguante.
Hice noche en Benidorn
y a la mañana siguiente, tempranito, pasé a buscar a
que se sumó al curso en el taller de
Antonia en GUADIR
una casa de repostería de ensueños,
paraíso visual para quienes amamos la repostería...
¿Les conté alguna vez que mis niños se controlan más en una juguetería que yo en una casa de repostería?
¡Ay Dios!
La tienda de Antonia...
¡Es que es una perdición!
Tiene una variedad increíble de cortantes, tintes, espátulas, moldes...dan ganas de llevarse todo!
Entre vuelta y vuelta
(es que tengo facilidad para perderme!)
llegué justo para comenzar la clase:
Nueve alumnas y una anfitriona maravillosas.
¿El resultado?
¡Nueve tartas preciosas!
A la mañana siguiente partí rumbo a Sitges,
al atelier de
donde me vestí de alumna y disfruté durante tres días un curso de flores en pasta de goma.
Allí conocí a
Rita y Maricarmen
dos valencianas con las que nos hartamos de hablar de repostería y pasar tardes inolvidables
Aproveché para extender mi estadía dos días más y pasear un poco por Barcelona....
¡Que ciudad atrapante!
¡Que ciudad atrapante!
A la vuelta pasé por Benicasím y conocí a
Silvia de Silmarí Repostería,
otra colega argentina.
Me recibió con un delicioso almuerzo y muchas ganas de charlar.
Disfruté cada lugar, cada ruta, cada camino y cada instante y regresé, diez días después, renovada,
con mucha necesidad de disfrutar de mis niños
y nuevas ideas que, de a poco, les iré contando!
con mucha necesidad de disfrutar de mis niños
y nuevas ideas que, de a poco, les iré contando!
Saluditos!
Ya de regreso en Algeciras!
Mariana